La parte central de esta Recomendación esta enfocada en que se priorice la mejora de calidad de vida de las y los habitantes y de las futuras generaciones de esta metrópoli, buscando un entorno de sana convivencia social y ambiental sustentable, siendo corresponsables del devenir de la configuración de nuestra ciudad y en el afán de contribuir a la construcción de un futuro con mejores condiciones para habitarlo según la visión de ciudad plasmada en el Plan de Acción Climática Metropolitana. De esta manera se hace un exhorto a todas las autoridades para asumir su responsabilidad en la gestión pública, bajo la premisa de que la ciudad tiene como finalidad favorecer el fortalecimiento social, cultural y político de todas y todos sus pobladores, mediante el aprovechamiento sustentable del territorio.